Hoy es día 2, y
eso quiere decir que restan 31 días para que de comiendo la Semana de Pasión.
Ya solamente tiene que pasar un mes para que el Nazareno de San Frontis salga
del que es su hogar durante todo el año a los sones del Himno Nacional, con
posteriormente, la marcha que lleve su nombre, dirección a la Iglesia Matter.
Con el carnaval ya dejado atrás y el primer domingo de cuaresma recién
finalizado, ya se escucha al barandales ensayar a los lejos…. parece que llega
la procesión…. las bandas y coros ultiman detalles; los distintos pasos e
imágenes están preparados para lucir sus galas, alguno que otro restaurado, las
túnicas ya cuelgan de los armarios, los fotógrafos se preparan para tomar las
mejores instantáneas, y con ellos multitud de personas vinculadas con este gran
sentimiento.
31 días donde la
ciudad se va engalanando y vamos “calentando motores” como quien dice mediante
conciertos, actos, asambleas y un sinfín de actividades relacionadas con la
pasión. Días de pasión, recogimiento, sentimiento, amistad, familiaridad,
emotividad, y alguna que otra lágrima dejándose ver.
Días de armonía, ambiente, olores,
sonidos -sonidos por supuesto emitidos
por hachones golpeando el asfalto, bandas, coros… porque el resto hemos jurado
guardar silencio-.
Un año más
tenemos la Semana Santa a la vuelta de la esquina, muchos participarán un año
más (cofrades, cargadores, músicos…), otros lo harán por vez primera, pero
todos coinciden en lo mismo, lo harán con la misma ilusión. Sobre todo con los
más pequeños, que, de momento, podemos estar tranquilos, el sentimiento semana-santero
seguirá presente una generación más.
Entramos
en la última treintena de días de espera.
Entramos
en los últimos preparativos.
Entramos
en Semana Santa 2020.
Texto y fotos: Víctor Garrido
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